Gracias a los mapas es posible aprender mucho: que la geografía es emocionante, divertida, fuerte, débil, falsa y mentirosa. Que su interpretación a menudo depende de quien la observa, y que un trazo bonito, un baño de oro, o unos contornos ilustrados pueden hacer que un lugar horrible parezca hermoso. Que un lápiz y una hoja son capaces de poner orden en el caos. Que sirven para llegar a un destino, y también para comprender el mundo, resaltando nuestra ignorancia, nuestra arrogancia y nuestros miedos, como cuando los exploradores dibujaban monstruos en pleno océano y caníbales en las tierras vírgenes. 

Los mapas lo permiten todo, y es posible acceder a ellos como en una novela. Los exploradores solo tenían una brújula; desde entonces, las cosas han cambiado mucho, pero siguen siendo lo mejor para vivir una gran aventura.

Contenido

Prefacio 7

Ciudades perdidas 10

Dos ríos y un mar 32

¡En ruta! 52

Tierras salvajes 80

Mundos de hielo 114

De un tren a otro 134

Al asalto de las montañas 148

Autora

Chilena de madre escocesa, Francisca Mattéoli es escritora de libros de viajes, autora de una docena de obras traducidas a varios idiomas. Tras pasar la juventud en Latinoamérica y haber vivido en Brasil, se instaló en París. Sus artículos se han publicado en muchas revistas internacionales, como National Geographic, Conde Nast Traveller y Air France Magazine. Es autora de un blog (www.franciscamatteoli.com/blog), y ha publicado las crónicas de sus viajes, "The Never Stopping Francisca", en la revista china Modern Weekly, la publicación sobre tendencias más influyente del país asiático.