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Sarajevo 1992-2008
- Un testimonio de la evolución y transformación de Sarajevo desde su asedio hasta hoy, el antes y el ahora. Un episodio que no debe ser olvidado.
- Una ciudad que se levanta sobre sus heridas, que se sobrepone y sigue adelante.
- Conmovedoras fotografías de Gervasio Sánchez que son el puente entre la ciudad de la guerra y la ciudad de la paz.
En el conflicto de Bosnia-Herzegovina dos millones y medio de habitantes (60 % de la población total) tuvieron que abandonar sus casas víctimas de la limpieza étnica. La mitad sigue viviendo fuera de las fronteras de Bosnia-Herzegovina o mantiene el estatus de desplazado interno. 250.000 bosnios fueron asesinados, de los que 16.000 eran menores de edad. Sólo en Sarajevo murieron 1.601 niños. Hay más de 25.000 menores huérfanos de padre o madre en todo el país.
Esta guerra ha marcado la vida profesional y personal de Gervasio Sánchez, «es raro el día que mi memoria no se detenga en aquel conflicto. […] Allí aprendí que la guerra no se puede contar. El horror es inimaginable para quien no lo ha vivido». Los más optimistas afirman que la ciudad no ha perdido su espíritu cosmopolita mientras los pesimistas creen que se ha disuelto en el desamparo de la posguerra. Pero casi todos claman contra los europeos : «Nos traicionaron durante la guerra y nos han abandonado después de los acuerdos de paz.»
Contenido
Textos de:
Juan Alberto Belloch, Alcalde de Zaragoza
José A. Armillas Vicente, Comisario del Bicentenario de los Sitios de Zaragoza
Carmen Magallón Portolés, Directora de la Fundación Seminario de Investigación de la Paz
Alfonso Armada
Ramón Lobo
Gervasio Sánchez
Fotografías del antes y del después
Autor
Gervasio Sánchez es periodista desde 1984. Sus trabajos se publican en Heraldo de Aragón y La Vanguardia, y colabora con la cadena SER y la BBC. Es autor de varios libros fotográficos, entre ellos Mujeres Women/Afganistán, Kosovo, Niños de la guerra, Sierra Leona. Guerra y paz, La caravana de la muerte. Las víctimas de Pinochet, Latidos del tiempo, Vidas minadas y desaparecidos/víctimas del olvido (publicados por Blume). Ha sido merecedor de los premios Cirilo Rodríguez, Club Internacional de Prensa, Andalucía de Cultura, Derechos Humanos de Periodismo, Liber Press, Javier Bueno y Joan Alsina de Casa América Cataluña; las instituciones aragonesas le concedieron la Medalla de Oro de Santa Isabel de Portugal y la Medalla al Mérito profesional. En 2008 obtuvo el Premio Ortega y Gasset por la fotografía Sofía Elface Fumo con su hija Alia y en 2009 el Premio Nacional de Fotografía. En abril de 2011 recibió el Premio Internacional Julio Anguita Parrado por «su independencia, su excelencia periodística y por ser capaz de mantener una clara conciencia cívica y un permanente compromiso cívico». El jurado también quiso «reconocer en su figura el valor del trabajo de los reporteros gráficos». En mayo de 2011 recibió la Gran Cruz de la Orden Civil de la Solidaridad Social. Es enviado especial por la paz de la UNESCO desde 1998.